Rocio es una niña de 1º de ESO del IES Azahar, en Antas, de la comarca del Almanzora. Este pasado sábado intervino en la jornada sobre Consejos Escolares que organizó FAPACE y nos trajo una preciosa carta que reproducimos integra, con el título de "LO IMPORTANTE ES ESCUCHAR".
Gracias Rocio, te escuchamos
Usaba Piscitelli un vídeo enervante en el que el locutor gritaba, sin parar, "Listen to me, listen to me" interrumpiendo un montón de cosas interesantes que iban desgranándose. Y de pronto te das cuenta que esa voz desagradable es la viva imagen de un o una docente promedio...
Una gran idea que no haya materias disciplinares, sino interdisciplinares...
Gracias, Rocío, por dejarnos escuchar tu voz y la de tus compañeros. ¡Cuánta razón tienes! El silencio tiene un prestigio en las aulas de secundaria que no se merece. Te aseguro que muchos docentes pensamos como tú, y que nos identificamos con ese instituto ideal que dibujan tus palabras. Un lugar en el que nos sintamos como en casa y que nos active la reflexión, la curiosidad, la alegría del conocimiento. Y es cierto, los docentes tenemos la obligación y la responsabilidad de hacer que esto sea posible. Hemos recibido una gran lección con tus palabras. ¡Gracias!
Gracias de nuevo, Rocío. Fue emocionante escucharte en ese momento y lo sigue siendo ahora. A veces se nos olvida la importancia de escuchar y necesitamos que alguien como tú nos lo recuerde. Compartimos sueños. Eso me hace feliz.
rocio me has conmovido, yo estube presente ese dia. tengo 41 años y recuerdo la escuela como un sitio triste, y ahora tengo una hija de 7 años, y la escuela es igual de triste. los pupitres son duros, en el invierno hace frio, en el verano hace calor, colores apagados. la seño dice - ¡cuando me descuido la encuentro hablando! tiene el mismo problema con todos los niños. yo le digo: - seño, con todo respeto ¿no estaran aburridos? - ¡no, aburridos no, si no paro de enseñarles cosas! no es broma, es real. rocio lo que tu dices: ella habla y habla y no escucha. que triste. no sabe lo que se pierde.
No hay comentarios. Es así y ya está...
ResponderEliminarUsaba Piscitelli un vídeo enervante en el que el locutor gritaba, sin parar, "Listen to me, listen to me" interrumpiendo un montón de cosas interesantes que iban desgranándose. Y de pronto te das cuenta que esa voz desagradable es la viva imagen de un o una docente promedio...
Una gran idea que no haya materias disciplinares, sino interdisciplinares...
Gracias, Rocío, por dejarnos escuchar tu voz y la de tus compañeros. ¡Cuánta razón tienes! El silencio tiene un prestigio en las aulas de secundaria que no se merece. Te aseguro que muchos docentes pensamos como tú, y que nos identificamos con ese instituto ideal que dibujan tus palabras. Un lugar en el que nos sintamos como en casa y que nos active la reflexión, la curiosidad, la alegría del conocimiento. Y es cierto, los docentes tenemos la obligación y la responsabilidad de hacer que esto sea posible. Hemos recibido una gran lección con tus palabras. ¡Gracias!
ResponderEliminarGracias de nuevo, Rocío. Fue emocionante escucharte en ese momento y lo sigue siendo ahora. A veces se nos olvida la importancia de escuchar y necesitamos que alguien como tú nos lo recuerde. Compartimos sueños. Eso me hace feliz.
ResponderEliminarrocio me has conmovido, yo estube presente ese dia. tengo 41 años y recuerdo la escuela como un sitio triste, y ahora tengo una hija de 7 años, y la escuela es igual de triste. los pupitres son duros, en el invierno hace frio, en el verano hace calor, colores apagados. la seño dice - ¡cuando me descuido la encuentro hablando! tiene el mismo problema con todos los niños. yo le digo: - seño, con todo respeto ¿no estaran aburridos? - ¡no, aburridos no, si no paro de enseñarles cosas! no es broma, es real.
ResponderEliminarrocio lo que tu dices: ella habla y habla y no escucha. que triste. no sabe lo que se pierde.